Indonesia está formada por un conjunto de 17.508 islas y se extiende más de 3000 kilómetros a lo largo de la línea ecuatorial, abarcando una amplia gama de hábitats. Hay más de 1000 especies de aves (tales como las cacatúas y las aves del paraíso), más de 500 mamíferos (incluyendo el orangután, el rinoceronte, el tigre, el elefante), y la asombrosa cifra de 250.000 especies de insectos. Hay 50 parques nacionales, seis de los cuales han sido designados como Patrimonio de la Humanidad (el Parque Nacional de Komodo, en las Islas de la Sonda y el Parque Nacional de Gunung Leuser en Sumatra son dos de ellos). Indonesia es también conocida por sus arrecifes de coral, y las provincias de Bali y Java son destinos populares para el snorkeling y el buceo. Más información sobre buceo responsable.
Se pueden encontrar zoológicos en la mayoría de las ciudades de Indonesia. Muchos de ellos se establecieron durante la ocupación holandesa y lamentablemente la mayoría de las instalaciones han mejorado muy poco desde entonces. Estas instalaciones tienen principalmente fines comerciales y su trabajo de conservación, educación e investigación es casi nulo. Los animales suelen vivir en condiciones precarias, en espacios sin ningún tipo de enriquecimiento ambiental y varios son obligados a llevar a cabo actividades anti-naturales. Más información.
La del aceite de palma es una industria en rápido crecimiento, ya que este producto se utiliza de muchísimas maneras, en alimentos, cosméticos, bio-diese, etc. Sin embargo, las grandes plantaciones utilizadas para producir las altas cantidades de aceite son devastadoras para el medio ambiente. En Indonesia se está destruyendo el hábitat natural de muchas especies para dar paso a las plantaciones de aceite de palma. Gran parte de la expansión de la palma aceitera en Indonesia se está llevando a cabo en las turberas boscosas, muchas de las cuales son áreas protegidas. El gobierno ha alquilado las áreas protegidas a las compañías petroleras y en otros casos las plantaciones se han creado ilegalmente en estas áreas con poco o ninguna recriminación.
Yakarta solía ser famosa por sus monos enmascarados obligados a actuar por las calles para los turistas. Estos animales vivían en pequeñas jaulas y eran entrenados con métodos crueles, como colgándoles boca abajo o manteniéndoles las manos atadas en la espalda: muchos de ellos de hecho morían durante el entrenamiento. En octubre 2013, el gobernador de Yakarta ha decidido poner fin a este terrible negocio, confiscando los animales y ofreciendo dinero y formación a sus "entrenadores" para que pudieran encontrar un nuevo empleo.
El 20 de Febrero de 2014, Indonesia se ha convertido oficialmente el hogar del más grande santuario de mantarrayas del mundo, con un espacio de 46,000 kilómetros cuadrados in Raja Ampat, una zona considerada a alto riesgo a causa de la sobre explotación pesquera y del cambio climático.
La nueva legislación, que otorga plena protección a estos animales, es el fruto de un estudio que demostraba que, a lo largo de su vida, una sola mantarraya podía generar un millón de dólares de beneficios para la industria turística y apenas entre 40 y 500 dólares si capturada muerta.
Serangan, o la isla de las 'Tortuga' en Bali se anunció como un área de conservación de tortugas financiada por el gobierno. Sin embargo, muchos informes recientes sugieren que el énfasis está mucho más en ser una atracción turística con poco respeto por la conservación y el bienestar de los animales. Un turista contactó con la organización británica Care for the Wild diciendo:” Toda la experiencia fue horrible, el agua estaba llena de barro, los animales estaban en condiciones de hacinamiento, y parecían mantenerse allí exclusivamente para las fotos turísticas. Todo el lugar nos hizo sentir muy incómodos y queríamos irnos. Puede que sea un proyecto de buena fe que se les ha ido de las manos, pero creí que valía la pena advertir de la situación”. Trip Advisor contiene muchos comentarios similares. Más información.
Alas Kedaton es otro centros que, tras una apariencia de reserva natural, mantiene animales para fines de lucro. El centro (supuestamente sagrado) cuenta con un gran número de monos así como, murciélagos gigantes o más comúnmente conocidos como zorros voladores. Aquí se permite a los turistas hacerse fotos, toquetear y juegar con estos animales. Interacciones de este tipo no solo pueden provocar un fuerte estrés en los animales, sino también implican riesgos para los visitantes ya que, una mordedura de un zorro volador puede llegar a transmitir un gran número de patógenos zoonóticos como la rabia e incluso el virus del ébola.
En este país también los turistas pueden contratar paseos en elefantes, actividad que implica gravísimas problemáticas físicos psicológicas para estos animales y encontrarse con falsos centros de rescate donde estos animales son obligados a llevar a cabo actividades anti-naturales y a interactuar con los turistas. Para más información consultar aquí y aquí.
La carne de perro y gato es un plato muy popular en algunos países de Asia, incluyendo partes de Indonesia, por ejemplo en la misma Bali. Mientras que el consumo de estos animales podría ser considerado "cultural", no hay ninguna manera humanitaria de matarlos –uno de los métodos es colgándolos por el cuello y dejándolos morir lentamente ya que se cree que si el animal está estresado cuando muere, la carne será más nutritiva. En algunos menús se indica que los platos están hechos con carne de estos animales mientras que otros restaurantes, conscientes de las posibles críticas de los turistas, prefieren indicar que se trata de carne de otras especies. Para más información leer aquí.
BAWA es una de las más importantes organizaciones locales de protección de los animales y que se ocupa principalmente de los perros y gatos callejeros de la isla de Bali.
En las islas Gili (Bali) –un archipiélago compuesto por tres pequeñas y hermosas islas situadas justo en frente de Lombok– el medio de transporte más utilizado para desplazar a los turistas son pequeños carros tirados por caballos. Estos animales suelen estar extremadamente delgados y tienen que pasar largas jornadas bajo el sol moviendo cargas demasiado pesadas para su anatomía. Varias organizaciones están pidiendo a las administraciones locales que se sustituyan estos carros por otros que funcionen con energía solar, pero de momento no ha habido ninguna respuesta positiva en este sentido. Los viajeros que no quieran fomentar este tipo de práctica puede desplazarse andando o en bicicleta (como indicado, las tres islas son muy pequeñas y se pueden recorrer perfectamente a pie). Más información aquí.
Indonesia cuenta con una gran cantidad de animales callejeros, que viven a menudo en muy malas condiciones. La población de gatos y perros callejeros se controla mediante sacrificios de masa y no regulados que suelen implicar métodos de sacrificio muy crueles. Si te encuentras con estos animales, puedes ayudarles dándoles un poco de comida y agua, pero evitando la interacción cercana con ellos para evitar el contagio de posibles enfermedades. Antes de viajar además, puedes apuntarte el contacto de las ONGS locales de protección animal para así informarles en caso de que te encuentres con animales muy enfermos o víctimas de maltrato o en caso de que quieras ayudar con un donativo. Más información.
En Indonesia es posible encontrarse con exóticos souvenirs hechos con partes de animales o animales vivos. Sin embargo sólo porque los artículos sean abiertamente expuestos para la venta no significa que sea ético o legal adquirirlos. La compra de recuerdos con partes de animales es totalmente desaconsejable ya que pueden haber sido obtenidos a través de crueldad hacia los animales incluso puede que su venta sea ilegal, como por ejemplo, en el caso de las marionetas hechas con partes de tortugas.
La compra de animales exóticos como mascotas también está muy difundida en este país, en especial por lo que se refiere a los loris perezosos y a los macacos. Muchos de los animales exóticos que se pueden adquirir en mercados y otro tipo de establecimientos, provienen de traficantes que los capturan de la naturaleza; otros se crían para satisfacer esta demanda: en la mayoría de los casos estos animales son mantenidos en condiciones deplorables e incluso mutilados para que no puedan atacar o herir a los turistas o compradores. A este respeto, aconsejamos ver este vídeo que enseña cómo se “preparan” para la venta en estos mercados los loris perezosos, especie gravemente amenazada. Más información aquí.
Las peleas de gallos son otros de los entretenimientos tradicionales de los indonesios. Originalmente constituían unas cruentas ofrendas religiosas, puesto que antes de las fiestas rituales se rociaba el templo con la sangre de un gallo para espantar a los espíritus. Hoy en día, desafortunadamente, este rito se ha generalizado hasta convertirse en una de las grandes pasiones del pueblo. Las peleas de gallos suelen tener lugar sobre todo en Bali y para realizarlas sería necesario obtener un permiso especial de las autoridades, aunque en realidad, las peleas tienen lugar casi todos los días en diversas localidades. Teniendo en cuenta la crueldad de estas batallas y el hecho de que posiblemente se trata de eventos ilegales, es muy importante que los turistas no asistan a este tipo de acontecimientos.
En varios lugares de Bali es posible encontrarse con empresas u hoteles que mantienen a delfines en cautividad y ofrecen a los turistas la posibilidad de nadar, interactuar e incluso llevar a cabo supuestas “terapias” con estos animales. Desafortunadamente además, Rick O’Barry denuncia la existencia de 3 circos itinerantes con delfines en Indonesia y que mantienen esclavizados de manera ilegal un total de 72 cetáceos, muchos de los cuales fueron capturados del estado salvaje.
Invitamos a todos los viajeros que estén pensando asistir o participar en estas actividades a encontrar más información sobre las graves problemáticas implicadas en los siguientes enlaces:
Uno de los platos típicos de la medicina tradicional asiática es la sopa con feto de pangolín. Los practicantes de esta medicina creen que comer al feto de este animal aumenta la virilidad de los hombres.
El grave problema es que estos animales tan solo tienen una cría por camada y la creciente demanda de esta carne ha llevado a una caza incontrolada de estos animales que se encuentran actualmente al borde de la extinción.
Más información sobre platos típicos con productos animales.
Los viajeros que visiten Indonesia o Timor Oriental serán invitados a probar el famoso café de civeta, también conocido como el café más caro del mundo. Lo que deberían saber antes de pedir esta bebida es que este preciado producto se consigue a través del abuso de muchos animales. Las civetas de palmera asiática, pequeños mamíferos típicos de estas zonas, son mantenidos en pequeñas jaulas y alimentados a la fuerza siguiendo una dieta debilitante a base de cerezas de café, para que, con sus excrementos, se pueda producir el famoso Kopi Luwak (café de civeta).
Un número cada vez mayor de "granjas" de estos animales están surgiendo en todo el sudeste de Asia, confinando a decenas de miles de estos animales a vivir en diminutas jaulas tras haber sido cazadas de la naturaleza.
Centros de rescate y proyectos recomendados:
Isla de Nusa Penida (Bali) Friends of the National Parks Foundation
Kalimantan, Borneo. Friends of the National Parks Foundation
IAR's Primate Rehabilitation Centre
A continuación, un listado de ONGs locales que se pueden contactar en caso de querer hacer un donativo, una denuncia o encontrar un animal que necesita ayuda en Indonesia:
Sumatran Orangutan Conservation Programme
En caso de querer denunciar un crimen contra la fauna salvaje es posible contactar con: Department of Forestry +62-21-5731820
Turismo Responsable - Fundación FAADA
93 624 55 38