Las agencias de viajes amigas de los animales: FENT MILLES

Fent Milles nació en 2004 con el objetivo de posicionarse en el diseño de viajes a medida con una amplia oferta que incluye temáticas como la fotografía, la observación de la naturaleza, la literatura, el arte o la danza. Comprometidos con los derechos de los animales y el medio ambiente, Yolanda García, de Fent Milles, invita a los viajeros a denunciar a su regreso cualquier actividad que consideren poco respetuosa.

1- ¿Conocíais la fundación FAADA? Sí, la conocíamos desde hace bastante tiempo, aunque nunca habíamos mantenido conversaciones a nivel de colaboración hasta hace unos meses, cuando nos contactaron para saber si estaríamos dispuestos a sumarnos a su proyecto.

2- ¿Por qué habéis decidido sumaros a esta iniciativa y convertiros así en agencia comprometida? Porque nuestro compromiso ya comenzó en el año 2004, aunque no estuviésemos vinculados a ellos. Mi filosofía acerca del turismo distaba ya en aquel momento años luz a lo que se ofrecía en la mayoría de agencias de viajes convencionales. Viendo la larga vida de otras agencias con la misma filosofía, aposté por llevar a cabo un proyecto, una ilusión,  que fue crear mi propia agencia, para integrar, siempre que fuese posible, un turismo respetuoso y comprometido con proyectos en defensa de nuestro planeta. Esa sigue siendo nuestra filosofía, de ahí nuestro interés en involucrarnos en actuaciones que nos permitan ofrecer al viajero la otra cara del turismo, ayudando a hacer crecer, económicamente hablando, a los habitantes del lugar que forman parte de esos proyectos. Es importante hacerles entender que sí existe una demanda por parte de algunos viajeros en conocer su existencia, en vivir experiencias que les enseñarán a entender lo importante que es velar por la continuidad de los ecosistemas y no destruirlos.

3.-¿Cuáles son los comentarios que recibís de los viajeros a su regreso? Ellos son los mejores embajadores para hacer saber al mundo que existen etnias en el mundo que están siendo acosadas para que abandonen sus territorios, que se ven forzadas a cambiar sus hábitos, sus costumbres y que podrían perder, por todo ello, su identidad como grupo social. Valoran enormemente la lucha que mantienen algunas personas que no desean ver como  grandes extensiones de tierra van a ser deforestadas, porque saben qué consecuencias acarreará eso en unos años… Regresan preocupados por los proyectos en defensa de muchos animales que se encuentran a salvo gracias a los cuidados que reciben en algunos santuarios. Entienden qué significa la caza furtiva cuando ven las crías huérfanas, sin el calor de sus madres las cuales han sido asesinadas por el simple hecho de poder traficar con sus órganos o bien comprenden las secuelas que acompañan de por vida a los animales que han sido abandonados después de haber sido explotados y maltratados por sus propietarios, quienes sólo tenían un único objetivo: lucrarse gracias a ellos.

4- La campaña de FAADA, ¿os ha hecho ver problemáticas que desconocíais hasta ahora? Claro que sí. Nosotros ocupamos nuestra jornada  laboral  en  nuestro trabajo, que es la comercialización de viajes, pero gracias a las comunicaciones que recibimos a diario por parte de FAADA y de otros movimientos conocemos qué pasa en el mundo y eso nos ayuda a plantearnos qué seguimos comercializando y que no, qué nuevos lugares podríamos proponer visitar a nuestros clientes en sus viajes, integrando en los mismos nuevos proyectos que van apareciendo. La labor de difusión que ellos realizan es algo importante para ampliar nuestros conocimientos y aplicarlos en nuestro trabajo diario.

5- ¿Habéis recibido quejas o sugerencias de algún cliente sobre malos tratos a animales, animales explotados… en algún viaje? No, quizá hemos tenido la fortuna de colaborar con los receptivos locales adecuados, porque hemos de tener en cuenta que muchas de las propuestas que se ofrecen a los clientes nacen de la venta directa de esos servicios en destino y desde aquí no es sencillo controlar si les llevan a un santuario “correcto” o a uno, llamémosle de “dudosa reputación”. Pero podéis estar seguros de que ante cualquier duda al respecto, lo primero que haríamos sería notificarlo a FAADA para que ellos investigasen sobre el tema y ante la certeza de que fuese un centro de “dudosa reputación” no dudaríamos en comunicar a nuestro receptivo nuestro desagrado por ofrecer un producto turístico de esas características y, consecuentemente, no seguiríamos  trabajando con ellos.

6-Tras sumaros a esta iniciativa, ¿habéis modificado alguna ruta o destinación que ofrecíais? Bien, no las hemos modificado, pero sí hemos puesto más énfasis en que sean nuestros clientes los que estén atentos a lo que les muestran en destino, haciéndoles cómplices del seguimiento.

7- ¿Hay algún tipo de actividad turística que implique explotación animal y de la que resulta difícil prescindir a la hora de organizar un viaje? Bien, no hace falta salir de viaje para contestar a esa pregunta…. Quizá dando este ejemplo voy a abrir un debate complicado, difícil, y que me enfrentará a personas que tengan una manera diferente de pensar a la que yo tengo, pero… ¿es una actividad turística que implica la explotación de los animales la existencia de un zoo en una ciudad? En ningún caso se le ha preguntado al animal si le parece bien y acepta voluntariamente vivir en cautividad. Podemos prescindir de muchas cosas cuando organizamos un viaje, pero si uno es respetuoso y las cosas se hacen bien, no deberíamos plantearnos prescindir de algo tan maravilloso como es el contacto con los animales en actividades de esto tipo hasta haber erradicado, por ejemplo, la venta de viajes de safari con el único objetivo de practicar la caza y regresar a casa con un “trofeo” o de no movilizarnos hasta conseguir que los gobiernos sean respetuosos con todos los seres vivos que coexisten bajo sus políticas. Sucesos como lo que está ocurriendo en Tanzania, donde la construcción de una autopista que cruzará el Serengeti y que si no se modifica su trazado acabará con la vida de millones de animales que viven allí, deberían movilizar al mundo entero y seguramente habrán muchas personas que no están enteradas de que algo así está ocurriendo.

 8- ¿Hay alguna destinación en especial donde consideréis que el bienestar animal es especialmente importante para la población local? El bienestar animal es importante a cualquier nivel, pero el ejemplo que te acabo de comentar de lo que puede pasar en Tanzania sería una muestra evidente de lo mucho que luchan miles y miles de personas de todo el mundo bajo un movimiento que sólo pretende frenar el asesinato de millones de animales. Organismos  a nivel internacional deberían poder cambiar el rumbo de ese proyecto, consiguiendo del gobierno de ese país el compromiso y la ejecución de una vía de comunicación alternativa, que no afectase el ciclo de vida migratoria de millones de animales que habitan el Serengeti y que evite un desastre a ese nivel. Ya no es sólo la muerte de millones de animales inocentes. Un desastre de esa magnitud  afectará a la industria turística local de manera irreversible.

9. ¿Tenéis algún mensaje para nuestros lectores y para los turistas en general? Si me lo permites, aprovecharía para invitarles a que no se queden de brazos cruzados y que dediquen algunos minutos de su valioso tiempo a leer más detalles sobre este tema accediendo en el facebook a http://www.facebook.com/amigosserengeti y si les parece bien, a pronunciarse a favor para que el proyecto de la autopista, tal y como se plantea, no se lleve a cabo. Hay miles de propuestas lanzadas por defensores de causas nobles en defensa de los animales alrededor del mundo que necesitan el apoyo de todos nosotros. Les animaría a involucrarse en ellas, a que las difundieran entre sus amistades, a hacer crecer el respeto hacia nuestro planeta. También les invito a que se planteen en sus próximas vacaciones practicar un turismo con sentido, porque estarán formando parte de proyectos que son una vía de subsistencia para la gente local y ese contacto directo les dará la oportunidad de conocer el destino desde dentro y no desde fuera, como turistas convencionales. Valorarán sus vidas de otra manera a partir de ese viaje. Y por supuesto, les pediría que a su regreso denuncien cualquier actividad que consideren poco respetuosa, porque quizá, gracias a ello, podamos salvar a algún ser vivo, víctima del abuso o del maltrato.  Muchas gracias!