El pasado 1 de febrero 2016, Gareth Crowe, que se encontraba de vacaciones en Tailandia con su familia, estaba realizando un trekking a lomos de un elefante en la isla de Koh Samui, cuando el animal que estaba montando se rebeló a su cuidador y sucesivamente le tiró al suelo.
La hija adolescente de la pareja de Crowe, también resultó herida tras caer junto a su padrastro.
Los testigos del accidente indican que el animal – conocido como Golf – se puso nervioso cuando su mahout empezó a sacarle unas fotos con los dos turistas encima, y a partir de ese momento se negó a obedecer a sus órdenes. El hombre empezó entonces a golpearle, hasta que el animal lo empujó con su trompa y luego se levantó repentinamente tirando al suelo a los dos turistas.
Este viernes, todos los 147 tigres del tristemente famoso Templo del Tigre (Tailandia) serán confiscados y tendrán que abandonar el centro, que –por fin –dejará de explotar a estos animales para fines de lucro.
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