Lorena Carrasco, la directora de Viajes Conosur, lleva años trabajando en el sector turístico y a lo largo de su experiencia ha podido ver con sus propios ojos muchas de las actividades con animales que los turistas pueden llegar a encontrarse. Por este motivo no se lo pensó dos veces en sumarse a la campaña y a continuación nos ofrece importantes consejos para ser un turista responsable.
¿Cuándo nació Viajes Cono Sur? ¿A qué tipo de cliente os dirigís?
Soy de Patagonia. Mi primer trabajo fue a los 16 años atendiendo a turistas que venían a visitar Península Valdés, y desde entonces he trabajado en agencias, receptivos y tour operadores. Viajes Cono Sur nace en Madrid en 2008 como resultado de esos años de experiencia y contactos. Debo dar gracias a mi marido que creyó y apoyó este proyecto. Internet es una gran herramienta pero puede ser confusa y no da garantías.
Nos dirigimos al viajero inteligente que valora el dinero invertido en un viaje y no se arriesga a cargarse su luna de miel por ahorrase unos pocos euros. Sabemos de personas que después de contratar un viaje barato por Internet llega a destino y no hay nada de lo que contrató. Ofrecemos asesoramiento y garantías, somos muy exigentes al seleccionar a nuestros proveedores, con los que tenemos estrecha relación desde hacen años.
Qué tipo de viajes ofrecéis?
Grandes viajes a medida. Argentina, Brasil, Chile y viajes exóticos como Amazonas, Antártida e Isla de Pascua. América del Sur y España están unidos por idioma, historia, lazos familiares y una gran curiosidad por conocerse. En el último año nos hemos enamorado de Tailandia y después de recorrer ese país estamos dando nuestros primeros pasos ofreciendo ese destino a nuestros clientes. Queremos derribar el mito de que los viajes a medida son más caros, todo lo contrario. Se trata de optimizar tiempo y dinero.
¿Qué os diferencia de otras agencias?
Podemos sugerir y aconsejar porque conocemos los destinos que operamos. Muchas veces nos llaman las agencias para que igualemos presupuestos que les trae el cliente. Nos encontramos con despropósitos como excursiones de avistaje de ballenas fuera de temporada y otros errores fruto del desconocimiento de quien ha diseñado ese viaje.
Hace poco visitando a una agencia cliente vi un catálogo de viajes a Patagonia. Había una foto de pingüinos Emperador (Que viven en Antártida) y los describía como “Pingüinos de Magallanes” en Punta Tombo. Soy de esa zona y me sentí molesta, porque nos tomamos muy en serio nuestro trabajo, y este tipo de detalles degradan la confiabilidad de los Tour Operadores en general.
¿Por qué habéis decidido sumaros a la campaña de FAADA por un turismo responsable?
Esta campaña apoya las mismas prácticas que desde el inicio venimos llevando. A pesar del dinero que mueve, una actividad turística como la caza, nos negamos a ofrecer ese tipo de producto.
Estando en Tailandia supimos que en la mayoría de los sitios turísticos con elefantes, les hacían pintar con la trompa o bailar el hula hula. El último día encontramos un refugio que los rescatan de la industria maderera. No era el más barato pero entendimos que era el único que nos daba garantías de trato ético a los animales.
¿Qué es lo que más os ha gustado de FAADA y su campaña?
En playas y centros turísticos se te acercan locales con un bebé mono ó de otra especie. Espero que esta campaña llegue a la mayor cantidad de viajeros posibles para que vean que con su propina están colaborando con que esos animales sigan fuera de su entorno. Muchos han sido arrancados de sus madres para ser paseados entre turistas que pagan por sacarse una foto de recuerdo.
¿Conocíais la Fundación? ¿Qué valoración hacéis del trabajo que lleva a cabo?
Conocía la Fundación. Es necesario concientizar a los viajeros para que sepan que con su dinero tienen el poder de apoyar iniciativas sostenibles. Animamos a conocer la fauna en su ámbito natural, de ser posible eligiendo iniciativas responsables.
¿Qué consejos dais, en el campo del turismo responsable, a los viajeros que contactan con vosotros a la hora de reservar un viaje?
Evita nadar con delfines en acuarios cerrados. Recomendamos visitar parques Nacionales y reservas de fauna. Especies como ballenas y pingüinos se ven en su hábitat, nuestra presencia debe ser casi invisible, debemos seguir las instrucciones de los guardafaunas, y no intentar tocar a los animales.
¿Cómo combináis el turismo con el bienestar animal y de la población local?
En Patagonia hay pequeñas comunidades como Puerto Pirámides, una aldea en la que todos sus habitantes viven en relación directa ó indirecta del turismo. Pirámides vuelve a la vida de junio a diciembre, temporada de avistamientos de ballenas. Se las ve desde pequeñas embarcaciones que deben detener motores y esperar a que la ballena se acerque. Y se acercan: ¡son curiosísimas! El futuro de las comunidades locales está en la educación, conservación y protección de sus recursos naturales.
¿Qué consejos daría para fomentar un turismo responsable?
Como viajeros somos responsables de lo que consumimos. Al contratar una excursión para ver animales averigua si están en cautividad o en libertad, cómo se gestiona el parque, qué trato se les da. Pregunta qué vas a ver, y desconfía de lo excesivamente barato.
