Whale watching en Mirissa (Sri Lanka)

Hoy Gemma comparte con nosotros su experiencia avistando cetáceos en la costa de Sri-Lanka. Nos cuenta que las diferentes compañías de avistamiento de ballenas y otros cetáceos en Mirissa se venden con el siguiente mensaje:

«Mirissa es uno de los mejores lugares del mundo para el avistamiento de ballenas, especialmente para el gran mamífero marino la Ballena Azul. A una distancia de ente 6 y 9 millas náuticas de la bahía de Mirissa se alcanza el hábitat de estas ballenas.

Nosotros, Whale Watching Club – Mirissa hemos operado tours para el avistamiento de ballenas durante los últimos cinco años, y  a través de nuestra experiencia podemos garantizar un 95% de éxito durante nuestras salidas. Nuestros tours comienzan en el puerto de Mirissa y la mayoría de las veces las ballenas pueden verse muy cerca de la costa, otros días puede llevar varias horas, ya que llegan a nadar muy lejos para buscar comida. A  lo largo de este viaje pueden verse también otras especies de ballenas, delfines y demás vida marina. Orcas, cachalotes, orcas pigmeas, rorcuales de Bryde son las diferentes especies de ballenas que pueden verse. Delfines giradores, delfines nariz de botella y delfines Risso, entre los varios tipos de delfines. También la tortuga verde, el tiburón ballena, el pez volador, atunes y otras muchas especies marinas pueden verse a veces.»

En Abril del 2015 realizamos un tour en una de las compañías operativas de Mirissa, y parece que nosotros tuvimos suerte, porque fue uno de los barcos menos abarrotados y más respetuosos según la normativa de avistamiento de los cetáceos, pero no siempre es así, aunque aquí os dejo las imágenes, mucho más descriptivas que las palabras, que confirman la conducción temeraria de estos barcos, que se cruzan entre ellos para acercarse lo máximo posible a las ballenas y ser los primeros, sin tener ni un ápice de respeto por la distancia de seguridad hacia las ballenas y exponiendo a los pasajeros al riesgo de volcar y hundirse.

Por el contrario, un avistamiento respetuoso, sin haber presenciado las comentadas negligencias y el estrés causado a los cetáceos, te lleva a disfrutar de un digno y hermoso espectáculo marino:

Durante nuestro viaje conocimos a un capitán voluntario de la Biosphere Foundation, que, a pesar de sus reiterados intentos por reconducir y reducir los impactos mortales con las ballenas azules, en la mayoría de las ocasiones, siguen ocurriendo inexorablemente, en uno de los lugares más concurridos del mundo, por el tráfico de las rutas de los gigantes buques de carga.

«Nuestros proyectos contribuyen al actual cuerpo de conocimiento sobre la biosfera e inspiran a los individuos a involucrarse en un trabajo de campo práctico y basado en programas de participación comunitaria.

Biosphere Foundation fue fundada en 1991, y ha impulsado una amplia variedad de investigaciones ecológicas y de proyectos educacionales en todo el mundo. Nuestra organización está colaborando con la Universidad de Ruhuna y Captain Raja (un barco de avistamiento de ballenas, Raja & las ballenas). Juntos iniciamos la Unidad de Investigación de mamíferos marinos del Océano Índico en Sri Lanka para investigación fundamental, conservación y educación»

Dado que la costa sur de Sri Lanka ha sido identificada como un área con alto riesgo de accidentes debido al solapamiento de altas densidades de ballenas azules (Balaenoptera musculus), y una de las rutas marítimas más saturadas, hemos iniciado un programa de investigación para abordar el problema de las colisiones y llegar a iniciativas de conservación. El principal investigador de este proyecto es Russell Leaper, miembro del Comité Científico de la Comisión Internacional de Ballenas, y que trabaja con la Fundación Internacional para el Bienestar Animal (IFAW) como científico de mamíferos marinos. En compañía de este equipo, y de otros expertos en mamíferos marinos, ha estado desarrollando su investigación en las rutas marítimas para evaluar la distribución de barcos y ballenas, y poder hacer recomendaciones para reducir el número de incidentes. Estos resultados, unidos a las observaciones recogidas por los barcos a lo largo de una serie de años, sugieren que moviendo el actual esquema de separación de tráfico un poco más mar adentro, podría reducirse sustancialmente el riesgo de colisiones con las ballenas azules. Basado en los datos hasta fecha de abril de 2015, desplazar el tráfico de barcos 15 nm hacia el sur, reduciría el riesgo de colisión de la ballena azul en un 95%.

Una denuncia, en letras mayúsculas, a todas las compañías de avistamiento de cetáceos en la bahía sur de Sri Lanka, a excepción de una de ellas, quizás, y un apoyo incondicional a la labor de la Biosphere Foundation.

03/09/2015